CAMINO MOZÁRABE (pulsar sobre cualquiera de las imágenes para ampliarlas)






Día 12º: Granada - Pinos Puente: 19,22 Km





Inicio la primera etapa de esta mi segunda salida al Camino Mozárabe, levantándome temprano en este Albergue de peregrinos del Monasterio Cisterciense de San Bernardo, situado en un escenario único.

Puedo escuchar como la peregrina holandesa Janny ya debe estar preparándose en la sala contigua a la mía, sin embargo, no coincido con ella. Van a ser las 06:30 horas, cuando después de realizar la oportuna aportación económica, dejo escrito mi reconocimiento y agradecimiento a la pareja de hospitaleros compuesta por Andoni y Elisabetta, abandonando el recinto del monasterio por la calle Gloria.





Debido a los lazos familiares que me unen a esta ciudad “nazarí” y al conocimiento de la misma, decido elegir mi propia ruta de salida intentando disminuir el recorrido.

Así pues, desciendo por la Carrera del Darro hasta la inmediata Plaza Nueva, de donde parte la calle Elvira, por la que camino en dirección norte durante 700 metros hasta llegar a la Puerta de Elvira, que cruzo del interior al exterior de la antigua ciudad.





Se construyó en el siglo XI por los sultanes ziríes y su nombre “Bab-Ilvira” se debe a que por ella se accedía a la Medina Elvira, posteriormente denominada Medina Garnata. Formaba parte de la muralla que unía por este y suroeste otras dos puertas existentes. No obstante, hasta la época actual, ha experimentado distintas transformaciones, llegando a conformar en la época de Yusuf I de la dinastía nazarita, una fortaleza autónoma. Hoy solo se conserva el arco nazarí flanqueado por dos torres de tapial, rematado todo por almenas, y el estribo del lateral norte, formado por tres arcos de ladrillo que sustentan el correspondiente adarve. Su otra cara, vista desde lo que era el exterior de la antigua ciudad, de esta Puerta o Arco de Elvira, se consideró uno de los principales accesos a la ciudad durante la dominación islámica.







Desciendo a continuación unas decenas de metros para salir a la Plaza de la Constitución, que rodearé para continuar a través del Paseo de la Constitución, manteniendo ahora la dirección noroeste.







He aprovechado perfectamente la iluminación nocturna para avanzar por el área urbana que prácticamente no se interrumpirá hasta la inmediata población.

Van a ser las 08 horas cuando ya dirigiéndome al término municipal de Maracena, aunque todavía por calles de Granada, puedo apreciar una de las múltiples flechas amarillas del Camino.







Caminando por esta Avenida de Maracena, perteneciente al barrio granadino del Cerrillo de Maracena, me encuentro con una sencilla edificación religiosa perteneciente a la Parroquia de San Juan de Dios.





Prosigo ya por el área urbana de la población de Maracena, caminando de acuerdo con las indicaciones de las flechas amarillas dibujadas en cualquier superficie que incremente su visibilidad.





O bien la dirección marcada por los mosaicos y flechas incrustados en las fachadas que me encaminan a través de la calle Real.





Finalmente, a través de la Calle Real, ya caminando por zona peatonal, desemboco en la Plaza de la Constitución.





Puedo apreciar la existencia de la cafetería El Dulce que con sus puertas abiertas me anima a estas tempranas horas a tomar el primer desayuno, disfrutando de un buen café con leche y un mollete de la tierra con tomate y jamón.





Finalizado el desayuno, contemplo un escenario y los decorados que se están instalando en la plaza con motivo de las próximas jornadas festivas.







También en el perímetro de la plaza, se encuentra la edificación de la Iglesia de La Encarnación, consagrada por los Reyes Católicos en el siglo XVI.

De estilo mudéjar, con armadura de madera y retablo gótico. En el siglo XVIII fue reformada y ampliada, adosándole una bonita torre.







En la esquina norte de la plaza, entre la calle Aljibe Alto y la fachada de la Iglesia de La Encarnación, se ha instalado un mural realizado por Francisco Ávila (artista nativo) en arcilla refractaria mostrando los encantos del pueblo en otros tiempos.





Finalizado el desayuno y esta entretenida visita a los aledaños de la plaza y sus edificaciones, tomo en dirección suroeste por la calle de Enmedio de acuerdo con la señalización.





En el cruce con la calle Barranquillo, ya en los extrarradios de la población, el aspa amarilla sobre un poste de madera me impide continuar en esa dirección, debiendo tomar a la derecha por esta última calle.





Esta calle o camino Barranquillo, me transmite la frescura de la vega con un suelo arcilloso y guijarros, avanzando en dirección noroeste, dejando en la margen derecha el lateral de un parque urbano.





Después de 500 metros llegamos al cruce con una pista asfaltada, donde se encuentra la estructura de una fuente, junto a unas obras que se están realizando en sus inmediaciones.







En este cruce continuaremos recto por esta pista asfaltada denominada camino de los Eriales en dirección noroeste, para encaminarnos a través de esta rica vega granadina hacia la cercana población de Atarfe.







Según voy avanzando por esta carretera de apenas tráfico, puedo disfrutar del maravilloso aspecto que ofrece la vega, hasta que después de 2,4 Km llego al puente elevado que me permitirá salvar el trazado de la carretera E-902.







Desde el paso elevado, se puede contemplar la rica vega, la cercanía de Granada y la impresionante mole de Sierra Nevada con su cima coronada por la nieve blanca despuntando entre la neblina.





La próxima e inmediata población es Atarfe, en medio de la vega y con su cara norte rodeada por la cadena montañosa de la Sierra de Elvira.

En una de sus elevaciones, el cerro del Castillejo, se encuentra la denominada ermita de Los Tres Juanes, cuya construcción se realizó en 1941 comprometida por la promesa de un vecino de Atarfe de dedicarla a San Juan Evangelista, San Juan Bautista y San Juan de Dios, aunque nunca tuvo el destino religioso que su promotor soñó.

En la actualidad y una vez restaurada en la década de los 90, se habilitó como centro socio-cultural, albergando un museo de ciencias naturales.





Apenas 950 metros después, accedo al núcleo urbano de la población de Atarfe, que me recibe con las instalaciones de su Parque de la Higueruela, a través del que debo cruzar.





Al salir del parque me encuentro con una enorme y artística estructura metálica que preside una glorieta, se trata del Monumento a la Concordia.







Prosigo mi recorrido en dirección al centro urbano, siguiendo las indicaciones de las flechas amarillas, aunque a escasos metros de la glorieta me llama la atención la presencia de una cafetería con terraza, de bastante utilidad para un desayuno, pero en mi caso ya lo hice en Maracena.







Prosigo mi recorrido hasta llegar a la Plaza de España, lugar en que se encuentra el Ayuntamiento de esta población, uno de los 35 municipios que componen el área metropolitana de Granada, que con sus 18.960 habitantes (INE 2020), es considerada en parte como una pequeña ciudad dormitorio.







Después de un breve descanso en la Plaza de España, prosigo caminando en dirección oeste por la Avenida de Andalucía, recorriendo así el área más comercial de la población, hasta llegar a la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Consolación.





Este templo, levantado en el solar que ocupó la mezquita de Xini, según atestigua el “Libro de los Hábices”. En el primer inventario de bienes de la parroquia de 1617, se recoge que el edificio era de una sola nave, siendo en 1642 cuando se produce una ampliación.

Actualmente es de planta rectangular con tres naves separadas por pilares que sostienen arcos de medio punto. Sus muros son de ladrillo y mampostería, cubiertos de alfarje moderno. Como patrimonio histórico artístico es considerado el principal edificio de la población.

Apenas 200 metros más adelante, en una placeta elevada en el margen derecho de la Avenida de Andalucía, se encuentra la edificación de la Ermita de Santa Ana, presidiendo la plaza la imagen del Sagrado Corazón.





De arquitectura más modesta que la iglesia parroquial, se construyó sobre el convento de la orden de San Pablo de la Cruz y en el lugar donde se ubicó el antiguo cementerio. Tiene una única nave que se cubre con armadura de limas moamares del siglo XVII.

Ahora en suave descenso en que la Avenida de Andalucía pasa a denominarse Avenida de la Estación y apenas 120 metros después, llego hasta una rotonda cuya escultura rememora los “oficios atarfeños”.





Deberemos abandonar esta rotonda en la segunda salida por la izquierda, caminando ahora en dirección suroeste por la continuación de la Avenida de la Estación durante 700 metros hasta llegar al cruce con la carretera N-432. (Intentaré describir este recorrido con la mayor amplitud posible, pues en mi caso, un pequeño error de interpretación, motivó que anduviese casi dos Km hasta retornar de nuevo a este punto).

Aquí hemos de prestar atención a la señalización y cruzar la carretera perpendicularmente para acceder al paso subterráneo, ya que el trazado del camino discurre por el interior del túnel, por la margen peatonal izquierda, según indica la flecha amarilla existente sobre el pasamanos.





Este paso subterráneo nos permite salvar el trazado de la vía del AVE, así que nada más salir del túnel por su margen izquierda, hemos de girar 180 grados a la izquierda para retornar ahora por superficie, pero ya en el otro margen de la vía del AVE.







Retorno ahora en sentido contrario por encima del túnel, en dirección a la mampara anti ruidos de la vía del AVE.







Al llegar a la mampara anti ruidos del AVE, tomaremos a la izquierda, por esta calle del polígono industrial que discurre entre las edificaciones y restaurante del polígono industrial a la izquierda y la vía férrea a la derecha, en dirección noroeste.







Ahora, manteniendo la dirección noroeste, he de pasar bajo el puente que soporta el trazado de la autovía A-92, junto a la vía férrea del AVE que me acompaña, de acuerdo con la indicación de la flecha amarilla.





Sobrepasado este tramo bajo la autovía, de nuevo la amplitud de la vega se abre ante mis ojos por el margen izquierdo, apareciendo en el horizonte de manera tenue la población de Pinos Puente, lugar en el que preveo terminar la etapa.





El recorrido prosigue por esta amplia y rectilínea pista asfaltada que da servicio a las parcelas de la vega, manteniendo el paralelismo a la vía del AVE.





Después de 1,1 Km de esta recta andadura en dirección noroeste, llego al cruce con la carretera GR-3406.





En este cruce, de acuerdo con la indicación de la flecha amarilla, tomaremos a la izquierda para apenas 10 metros después cruzar la carretera y desviarnos a la derecha por la Vía Pecuaria asfaltada que prosigue paralela a la vía férrea.







Un nuevo tramo recto a través de la vega, con campos de espárragos en el margen izquierdo y la vía férrea por el margen derecho, continuando el avance en dirección noroeste.







Después de 2,9 Km de este nuevo tramo de trazado rectilíneo, llego ante un nuevo paso elevado que en esta ocasión me permitirá salvar el trazado de la vía férrea para continuar caminando por el margen derecho de la misma en dirección noroeste.







Solo debo seguir la señalización de flechas amarillas para ascender a este paso elevado.





Después de salvar un pequeño ribazo que me acortará unos metros el recorrido para subir a este paso elevado, me encuentro caminando ya por encima de la vía férrea con el de pasar al otro margen de la misma.





Según voy descendiendo del paso elevado, puedo apreciar una amplia panorámica de la población de Pinos Puente, a la que me dirijo como objetivo final de etapa.





Son apenas 500 metros la distancia que me separaban del núcleo urbano, al que accedo cuando va a ser el mediodía pasado, llegando a la glorieta por la que discurre la carretera N-432.







La carencia de Albergue de Peregrinos en la población, me obliga a utilizar un alojamiento alternativo, en este caso se trata del Hotel Restaurante Montserrat, situado a escasos metros al oeste de la glorieta y junto a la carretera N-432, en la ribera del río Cubillas.







Después de acreditarme e inscribirme, me instalo en la habitación asignada en el Hotel Montserrat, establecimiento recomendado en la guía de la Asociación Jacobea de Almería – Granada Camino Mozárabe, equipada con todos los servicios.

Como todavía es temprano, decido recorrer alguna parte de la población para localizar el Ayuntamiento y sellar la Credencial. Se encuentra algo distante del hotel, no obstante, cuando llegué, fui atendido con amabilidad en este singular edificio y sellada la Credencial.







Esta población, declarada ciudad por Alfonso XIII en 1928, situada al pie del Piorno y atravesada por el río Cubillas, cuenta con 9.853 habitantes (INE 2021). En su estructura urbanística tiene dos partes claramente diferenciadas, la margen derecha del Cubillas, por la que extiende con mayor amplitud el área urbana con sus principales edificaciones y servicios, y la margen izquierda del río con construcciones desarrolladas ascendiendo por la colina.

Al regresar del Ayuntamiento camino del hotel, realizo el recorrido por la calle Real, pudiendo contemplar solo el exterior de la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Consolación, puesto que a estas horas la iglesia está cerrada.

Esta edificación, cuya construcción de tipología mudéjar se estima en el siglo XVII. De sobria y clasicista fachada, dotada de una portada muy sencilla con un arco de medio punto y dos pilastras con una cornisa y frontón partido por una ventana coronada por otro frontón más pequeño, en cuya cúspide sobresale una cruz.

El campanario estaba inicialmente situado detrás de la sacristía, pero a mediados de la década de 1890 se derrumbó a causa de un terremoto. La torre y campanario actual se construyó a mediados del siglo XX en ladrillo y cantería.





En su fachada lateral destaca una portada que imita a las del siglo XVIII, con aletas formando roleos y una hornacina con una virgen un tanto tosca, diferenciándose así de la portada principal.





Continúo caminando por la calle Real hasta llegar frente al denominado Puente Califal, catalogado como tal en siglo IX y considerado Bien de Interés Cultural desde 1922.





El puente consta de tres grandes arcos de leve herradura de sillería y un cuarto arco que se encuentra tapado en el frente norte.

Se encuentra coronado por una capilla dedicada a la Virgen de las Angustias y que popularmente se conoce como “La casica de la Virgen”, con un arco de paso y una linterna ochavada con una bóveda interior de estilo mudéjar, todo rematado por un tejado a dos aguas.

Regreso al hotel donde después de tomar una cerveza en la terraza del restaurante, me encuentro con unos peregrinos franceses con quienes no había coincido hasta el momento y con Janny, que se hospedan en este mismo establecimiento.

Después de degustar unos ricos callos en la comida y disfrutar de la tranquilidad del florido y profusamente iluminado salón del comedor, decidí retirarme un rato a mi habitación.







A media tarde considero apropiado recorrer la población con el fin de identificar la ruta de salida de mañana, por lo que regreso hasta la calle Real para caminar ahora de acuerdo con la indicación de las flechas amarillas que tengo localizadas junto a la Iglesia.

Al comprobar que a estas horas el edificio de la iglesia está abierto y permitido el acceso, puesto que hay previsto un oficio religioso, aprovecho para visitar su interior.







Su interior está compuesto por tres naves separadas por grandes pilares macizos octogonales, realizados con piedra de sierra Elvira, formando arcos de medio punto.

La meteorología que amenazaba con lluvia, logró finalmente hacer acto de presencia con la suerte de encontrarme dentro del edificio religioso. La tormenta duró exactamente el mismo tiempo que el oficio religioso lo que me permitió asistir al mismo y además evitar que me mojara.

Ya pasada la tormenta, frente a la fachada principal de la iglesia, en el lateral de un edificio observo la flecha amarilla situada en un mosaico, marcando la dirección oeste.

Camino hasta el final de la calle Real en esta dirección confirmando que esta es la ruta de salida que continua por la barriada de la Paz hasta desembocar en la carretera GR-3408. Esta opción de recorrido es la que he elegido para la etapa de mañana, puesto que existe otra opción, que parte del norte de la población y discurre a través de unos inmensos campos de olivos, mucho más aislada y solitaria.

Con la premura de la inestabilidad meteorológica comienzo a realizar el camino de retorno, apreciando la belleza de un edificio en este recorrido. Se trata de la denominada Casa de Doña Eva, construida ya en la edad moderna, que llama la atención tanto por sus proporciones en relación con el resto de las edificaciones como por la belleza de su fachada y la singularidad arquitectónica con los torreones en las esquinas.

Actualmente está dedicado este edificio a Centro de Educación Infantil.







Prosigo mi caminar de retorno hacia el hotel ya sin más dilación puesto que el cielo amenaza con nueva tormenta y voy desprotegido.

Ya en el hotel, después de un breve descanso y revisar la ruta prevista inicialmente para mañana con la idea de llegar hasta Moclín, puesto que existe dos posibles opciones de recorrido.

La primera opción sale de la población por el norte, a través de la calle Ancha, para discurrir posteriormente en dirección norte a través de unos inmensos campos de olivos, bastante aislada y solitaria, hasta cruzar la carretera GR-3413, a la altura del PK 5, hasta pasar el cortijo La Bruja, donde se toma ya la dirección oeste hasta la población de Olivares.

La segunda opción por mi elegida será cruzando la población en dirección oeste por la calle Real, hasta llegar a la carretera GR-3408, por donde se camina en dirección norte, siguiendo paralelo a la ribera del río Velillos, por el cortijo de Bucor, hasta llegar por el sur a la población de Olivares.

Tras tener clarificado el recorrido de mañana, decido tomar algo de cena en el restaurante de que dispone el hotel, compartiendo espacio con algunos vecinos, ya que los peregrinos esta noche decidieron cenar en otro restaurante existente en las inmediaciones.

Finalizada la cena me retiro definitivamente a descansar, conociendo además la temprana apertura del bar para desayunar a la mañana siguiente.



Mi sugerencia: Contemplar la opción de cubrir la etapa por los campos de olivos, no obstante el ascenso desde Olivares a Moclin es común a cualquiera de la dos opciones, ¡espectacular!.



Albergues de la Etapa y otros alojamientos:

Atarfe:
-Hotel Corona de Atarfe**
    Localización: Calle Cuba, 1
    900 metros al suroeste del Ayuntamiento
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 958 43 65 89 / (+34) 615 48 00 22 (María Francisca)
    Atención Especial a Peregrinos

-Hotel El Doncel**
    Localización: Calle Océano Pacífico, 1
    550 metros al sureste del Ayuntamiento
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 958 43 41 46

-Hotel Las Yucas**
    Localización: Ctra. de Córdoba, km. 428
    1,2 Km al sur del Ayuntamiento
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 958 43 88 78 / (+34) 679 66 43 86



Pinos Puente:
-Hotel Monserrat
    Localización: Carretera de Córdoba N-432
    En nucleo urbano
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 958 45 03 58
    Atención Especial a Peregrinos