
EL CAMINO DEL NORTE (pulsar sobre cualquiera de las imágenes para ampliarlas)
Día 33º: Gontán - Vilalba: 21,12 Km
La etapa de hoy ronda los veinte kilómetros, pero de acuerdo con mi costumbre antes de amanecer ya me encuentro dispuesto para la marcha conociendo además que
el bar Da Feira estará abierto para desayunar puesto que el día anterior cerró por descanso, pero es un buen sitio donde poder comer y disfrutar de una cocina
casera.
El trayecto hasta Abadín es ya conocido del día de ayer puesto que me desplacé a comer allí, así que después de bordear la industria láctea asciendo por una calle
que me deja en la carretera N-634, punto en el que existe un “mojón con vieira” que me recuerda que aún me quedan ciento cuarenta y dos kilómetros para llegar a
Santiago.

En el centro de la población observamos una indicación hacia la derecha señalizando la dirección de la Oficina de Correos, al llegar frente a dicha oficina se
toma el desvío de la izquierda que nos irá alejando de la población casi de forma paralela a la N-634.
El cielo está poblado por nubes dispersas con pequeños claros azules mientras voy caminando por una senda comienzo a dar vista a un valle que en su profundidad
está oculto tras la niebla que a estas horas de la mañana aún se mantiene.

Comienzo un suave descenso que me conducirá hasta el río Anllo por una senda plenamente cubierta de vegetación permitiéndome caminar sobre una verde alfombra
que te humedece las botas con el rocío mañanero aun en su plenitud antes de que la fortaleza del sol lo haga volatilizarse.

Hay tramos incluso donde los propios árboles y su follaje conforman un túnel que da sombra y frescor a la senda como un verdadero capricho de la naturaleza.

Entre el verdor y la niebla ya se puede contemplar el puente que me permite salvar el incipiente cauce del río Anllo que en su breve recorrido de unos cuarenta
kilómetros y después de recibir las aguas de varios afluentes aportará sus aguas al río Miño.

Dejando atrás el río inicio la salida del valle con su densa neblina, cuanta razón llevaba Alberto (hospitalero de Gontán) respecto a la belleza del este tramo,
gracias, no me hubiese gustado perderme este verdadero disfrute de la naturaleza.

A medida que voy abandonando el valle en conjunción con los tímidos rayos solares que comienzan a filtrarse por nubes cada vez más difuminadas, me permite disfrutar
de escenas únicas que a otras horas del día sería imposible contemplar.

Con el inexorable caminar observo como con paciencia voy aminorando la distancia que me separa de Santiago tal como indica la perfecta señalización de los mojones
del Camino, a los que por desgracia en bastantes casos el “incivismo” de personas que posiblemente con ánimo de obtener un “souvenir” destrozan estas apreciadas
y bonitas informaciones. Solo me quedan 140 kilómetros para llegar a Santiago.

En tierras de Ponterroxal se va suavizando el ascenso por campos de siembra con enormes arboledas que en su momento alimentaran con su madera los aserraderos y
papeleras de la zona.
Un nuevo y prolongado descenso por cuya senda aún se puede observar la acción de las incesantes lluvias caídas en esta época aunque te permite caminar con facilidad
por estos bellos parajes camino de Barral.

Con algo más de siete kilómetros recorridos en esta maravillosa mañana gallega llego a la población de Barral perteneciente a Castro Mayor, información que me
facilita una paisana del lugar. Dispone de una sencilla iglesia y su aledaño cementerio con una arquitectura neogótica funeraria realizada en piedra en la que
destaca la vistosidad y esbeltez de las cruces.

Algo más de tres kilómetros cuando llego a un bonito puente llamado Ponte Vella de Martiñán que me permite salvar el río Batán, es una construcción del siglo
XVIII con dos grandes arcos desiguales y un tercero más pequeño que permite el aliviadero del cauce en épocas de máxima pluviosidad.

La mañana es agradable y la hora propicia para tomar algo de las reservas alimenticias que transporto, así que aprovecho la preciosa zona de descanso habilitada
junto al puente para disfrutar de un pequeño refrigerio a la vez que me tomo unos minutos de descanso.
Continuo la marcha y la belleza del paisaje me sigue sorprendiendo por la comodidad de sus sendas sin olvidar que la climatología me sigue acompañando con una
excelente temperatura y la ausencia de lluvia.

Hasta los pequeños riachuelos “miman” el cruce de la senda sobre inmensas losas de piedra en las que el musgo se ha adueñado de algunas de ellas.

Después de dieciséis kilómetros el camino “toca” un tramo de unos centenares de metros la N-634 en la población de Goiriz, único punto de avituallamiento en la
etapa de hoy así que cuando son algo más de las once horas aprovecho la presencia del Bar Pernas para degustar un fenomenal chorizo a la plancha con una excelente
cerveza y …. “vuelvo ser persona”,
En las proximidades según avanzo por la carretera destaca su iglesia parroquial de Santiago y el cementerio de estilo neogótico con su arquitectura funeraria con
bonitos trabajos de cantería verdadera especialidad de la zona.

Destaca en las proximidades, justamente en el lado opuesto de la carretera, un cruceiro junto a un pequeño habitáculo que encierra posiblemente un distribuidor
de agua con la inscripción de Campo Do Cristo (Goiriz) y los verdes prados como fondo donde pasta el ganado.

Inmediatamente tomo el desvío perfectamente señalizado en el arcén derecho de la carretera para continuar disfrutando de las maravillosas sendas de estas tierras
y olvidarme del tráfico rodado entre cruceiros y tranquilidad.

Aunque inicialmente camino por zona arenosa y asfaltada, rápidamente otro nuevo desvío me introduce entre la vegetación y las casas de labranza de la zona.

Después de casi tres kilómetros aparece nuevamente la N-634 que me dejará a la puerta del bonito y moderno edificio del Albergue de Vilalba cuando son las trece
horas pasadas.

Después de descansar un rato y apreciar su bonita estructura, dado que es hora temprana y aún está cerrado decido continuar hasta el centro urbano de Vilalba pues
tengo interés en conocer esta tranquila y sencilla población capital de la comarca y de la Terra Chá que aún dista dos kilómetros de este polígono industrial.
El lugar que elijo para alojarme es el sencillo Hostal Anduriña, cuyo mismo nombre ya me produce una cierta “saudade”, en pleno centro de la población, con todo
el encanto y la tranquilidad de los años veinte a los que en verdad se siente uno trasladado por la realidad de sus instalaciones y mobiliario, pero con una
limpieza y pulcritud digna de admiración.

La propietaria, una bella y gran señora que debió conocer el romanticismo y la grandeza de la época floreciente de este Hostal, posiblemente Gran Hotel de renombre
entonces, junto con sus dos ayudantes con las que comparte también época, todo amabilidad, educación y delicadeza con este único inquilino en el día de hoy.
Después de acompañarme pacientemente una de sus ayudantes a través de las escaleras hasta la segunda planta en que me alojaron, a pesar de mi insistencia para
evitarle el enorme esfuerzo que le suponía el acceso por las innumerables escaleras, me informó sobre las prestaciones de mi amplísima habitación y su enorme
cuarto de baño, como cualquier gran hotel que así se precie.

Mi estancia en este “maravilloso” lugar de fantasía fue como una vuelta atrás en el tiempo en un ambiente inimaginable en la época actual, en mi caso toda una
satisfacción difícil de explicar aunque me permito sugerir que aquellas personas amantes de la tecnología, la perfección de los modernos colchones, mobiliario
“ikeano” y cualquier otra característica avanzada del ya pasado siglo XX, intente abstenerse de alojarse en este lugar.
Una vez acomodado, aseado y perfectamente revisado el estado y disponibilidad de mi mochila, decido buscar algún lugar próximo para comer.
El Hostal Anduriña, ubicado a escasos metros de la Torre del Homenaje del que fue Castillo de los Andrade y actual emplazamiento del Parador Nacional de Vilalba,
dispone de una innumerable oferta gastronómica en los alrededores.

A no más de cincuenta metros de distancia encuentro un mesón con un moderno comedor en la planta sótano que cumplió perfectamente para cubrir mis necesidades
gastronómicas y a un muy módico precio.
Posteriormente dediqué la tarde a recorrer la población, visitando la iglesia parroquial de Santa María cuyo actual edificio de la segunda mitad del siglo XIX
sustituye al antiguo templo románico.

Como necesitaba provisionarme de algunas cosas para mis días siguientes, después de visitar una conocida cadena de supermercados, recorrí a mi regreso la Rúa
Porta De Cima o Rúa Porta Décima, posiblemente la calle más antigua de la ciudad y que el siglo XIII era uno de los accesos a la amurallada ciudad de Vilalba,
además está integrada en el Camino de Santiago como bien se rememora en una de las innumerables placas de bronce que existen distribuidas por la citada calle.

Ya al anochecer y con el fin de tomar algo suave que me sirva de merienda cena, opto en uno de los múltiples bares existentes por degustar un pincho de tortilla
para definitivamente retirarme a mi alojamiento en el que todavía permanecían dedicadas a sus tareas “mis anfitrionas” que preocupadas por la temperatura a pesar
de las múltiples mantas de que disponía en mi habitación decidieron conectar la calefacción, aunque continuase siendo el único inquilino, aprovechando para despedirme
de ellas puesto que como habitualmente hago tenía pensado salir temprano. Vaya para mis insignes “anfitrionas” todo mi agradecimiento.
A veces, al separarte del alojamiento habitual del peregrino, el albergue, te aíslas de los vínculos que el Camino te ofrece pero también es apropiado para poder
disfrutar de otras vivencias y conocimientos que difícilmente conseguirías de otra manera, permitiéndote cierta libertad de horarios.
Albergues de la Etapa y otros alojamientos:
Abadín:
-Albergue Xabarín
Localización: Avenida de Galicia, 28
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 50 80 25 / (+34) 690 18 18 11
Inaugurado en Abril de 2017
-Albergue Goas
Localización: Avenida de Galicia, nº 19
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 508 005 / (+34) 647 453 696
Inaugurado el 18 de Abril de 2018
-Pensión Niza
Localización: Avenida de Galicia, nº 31
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 50 80 32
-Pensión Casa Goas
Localización: Avenida de Galicia, nº 21
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 508 005 / (+34) 647 453 696
As Paredes (Castromaior):
-Albergue O Xistral
Localización: Lugar de As Paredes, 35
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 673 524 257
Inaugurado en Abril de 2017
Goiriz:
-Pensión H. O´Cristo
Localización: Campo Do Cristo, 20; Ruta Nacional 634 (4,5 Km antes de Vilalba)
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 52 73 22
Vilalba:
-Albergue de Peregrinos de Vilalba
Localización: Polígono Industrial, junto a N-634 (antes de entrar en Vilalba)
Propiedad y Gestión: Xunta de Galicia
Tel.: (+34) 659 49 49 69 (Protección Civil)
Inaugurado en 2007
-Albergue Turístico As Pedreiras
Localización: Rúa Pita da Veiga, nº4 Bajo
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 510 724 / (+34) 620 137 711
Inaugurado en Abril de 2017
-Albergue Turístico Castelos
Localización: Rúa das Pedreiras, 16
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 100 887 / (+34) 676 153 184
Inaugurado en Abril de 2015
-Pensión Villa Alta***
Localización: Calle Pravia, 26
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 510 185
-Pensión Casa Seijo*
Localización: Calle Plácido Peña, 36
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 510 719
-Hostal Terra Cha**
Localización: Domingo Goás, 10
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 511 702
-Hotel Venezuela*
Localización: Plaza de Suso Gayoso, 10
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 51 06 59
-Hotel Vila do Alba**
Localización: Campo de Puente, 27
Propiedad y Gestión: Privada
Tel.: (+34) 982 510 245
-Parador de Vilalba****
Localización: Valeriano Valdesuso, s/n
Propiedad y Gestión: Estatal
Tel.: (+34) 982 521 000
982510011