VÍA DE LA PLATA (pulsar sobre cualquiera de las imágenes para ampliarlas)






Día 25º: El Cubo de la Tierra del Vino - Zamora: 31,46 Km





Me levanto aún anochecido, el albergue permanece en silencio y después de preparar mi mochila, procedo a desayunar, ya que acepté la oferta de este servicio por lo que al menos podré ponerme en Camino con un café con leche. También observo que ya se adelantó el matrimonio balear.

Hoy es festivo y el ambiente está tranquilo en el pueblo cuyas calles recorro, ya con luz del día, hasta llegar a la calle Mayor y pasar junto a la plaza de su ayuntamiento, donde aún se mantiene el alumbrado eléctrico.





Atrás queda el núcleo urbano, dejo la iglesia en el margen izquierdo y continuo por carretera asfaltada. Sobrepasado el puente que salva el arroyo de San Cristóbal, apenas 50 metros, abandono la carretera por la izquierda, de acuerdo con la señalización existente, tomando aquí una amplia pista por cuyo margen derecho nos irá acompañando el trazado de la antigua vía férrea.





Caminaremos paralelos a este antiguo trazado de la vía férrea que conducía a Zamora, hoy en desuso, durante aproximadamente 5,0 Km.

Mientras tanto seguiremos atentos a la señalización del Camino, para continuar esta pista que a pesar de los desvíos nos permite continuar paralelo a la vía férrea, obviando así este primer desvío que sale a la izquierda.







Se dejan notar los restos de las recientes lluvias, aunque no impiden en absoluto el tránsito por la pista, entre encinas y los raíles del tren.







Las imágenes que va presentando este recorrido me hacen volar con la imaginación hacia otras épocas en que las vías férreas soportaban el paso de las grandes locomotoras de carbón, acorde con la señalización de entonces, como el letrero que avisa de: “Ojo al tren - Paso sin guarda”, señal situada sobre unas tablas cruzadas en forma de aspa.







Se cumplen 5,7 Km desde que inicié la etapa y llegó el momento de separarme del trayecto de la vía férrea, girando a la izquierda en dirección noroeste





Rodeado de campos de labranza, en medio de una paz y tranquilidad que a estas horas de la mañana se hacen cómplices de la excelente temperatura reinante, decido realizar un breve descanso, aprovechando la existencia de un mojón para depositar la mochila.





En suave ascenso se camina por el Valle de la Corta. Después de 2,5 Km, un nuevo giro a la derecha nos lleva a recuperar la dirección norte, con la vista en los campos de siembra de cereal con su verde espectacular.







Aquí finaliza el ascenso y da paso a unas vistas del campo zamorano que se pierden en el horizonte mezclándose con la existencia de los primeros núcleos urbanos.







Los múltiples colores de los campos de labranza presentan un bello mosaico con una impresionante definición de las líneas que marcan las distintas variedades de siembra.







El contraste que ofrecen estos campos de siembra con las vides que pueblan también la zona, resulta sorprendente, pero no hemos de olvidar que estamos atravesando unas tierras que en otros tiempos producían una gran cantidad de uva, pero la filoxera que se sufrió durante el siglo XIX, diezmó de manera considerable la producción.





Ya por tierras de Villanueva de Campeán, descubrimos un nuevo tipo de miliario moderno, en el que figura la inscripción de “Vía de la Plata – Villanueva de Campeán”.





Por detrás de mí se aproxima a una velocidad de crucero un nuevo peregrino, así que en breves instantes se iguala con mi altura y rápidamente me sobrepasa, despareciendo rápidamente por la línea del horizonte.







Ya en las proximidades de Villanueva de Campeán, se puede contemplar la enorme edificación existente a la derecha, a escasos metros del Camino.

Se trata de las ruinas del Convento Franciscano de Santa María del Soto, lugar en el que se instalaron el siglo XIV un grupo de franciscanos, viviendo su máximo esplendor durante los siglos XVI y XVII. Sin embargo, tras la Desamortización de Mendizábal, se procedió a su venta de forma fraccionada, llegando a esta penosa situación hasta nuestra época. Sobre sus formas sencillas y austeras solamente destaca la belleza de su fachada principal.

Dado su estado de abandono, decido continuar mi camino, evitando así en la soledad cualquier tipo de sorpresa desagradable entre sus ruinas.





Ya a las puertas de la población de Villanueva de Campeón, tierra pródiga en buenos vinos, accedo a la misma por la calle Calzada que atraviesa la población transversalmente en dirección norte.





A mitad de la calle Calzada, me encuentro con el bar Vía de la Plata, así que aprovecho para hacer un descanso e intentar tomar un desayuno algo más contundente cuando van a ser las 10:00 horas.

Para mi satisfacción tenían ya la cocina abierta y pude degustar un excelente montado de chorizo a la sidra, acompañado de una cerveza.

No era el único cliente, aquí encontré al peregrino que me adelantó con una cadencia de paso impresionante. Después de saludarnos me comenta que no va de peregrino, solo que está de vacaciones (hoy es festivo) y acostumbra a hacer un poco de ejercicio caminando (yo pienso que volando). El día de hoy ha comenzado a caminar en El Cubo de la Tierra del Vino y piensa finalizar en Zamora de donde es nativo. Realmente vamos a hacer el mismo recorrido, pero entiendo que con el ritmo que lleva, tranquilamente me puede sacar una ventaja superior a una hora.

Ante mi consulta culinaria para Zamora, me sugiere un par de lugares donde comer o cenar, así que agradezco la información y nos despedimos, el continúa su “galopar”.

Mi descanso se prolonga algo más de lo normal, tanto por la consumición del montado solicitado como por la agradable conversación que mantuve con el propietario del bar. Así pude conocer algunas de las peculiaridades de esta pequeña y sencilla población, con pocos habitantes de hecho, pues dada la proximidad de Zamora muchas personas han optado por vivir en la capital de provincia y desplazarse a diario para las labores que deban realizar en sus propiedades agrícolas o ganaderas.

Solo media hora después y habiéndome despedido de este agradable anfitrión, abandono la población por la citada calle Calzada, abriéndose ante mí una inmensa llanura de campos de siembra.







Un nuevo monolito de miliario moderno marca la dirección a seguir, cruzando el cauce del pequeño arroyo de los Barrios, hoy sin agua.







Después de 3,8 Km de caminar por esta inmensa y rectilínea llanura, llego a un cruce de caminos, en el que la señalización indica girar a la derecha 90º, para continuar por la pista que va en dirección este. Sin embargo, al fondo se pueden observar las edificaciones de la no muy lejana población de San Marcial, solo 1,2 Km.







Un nuevo monolito granítico con bordón, me vuelve a marcar la dirección del Camino, encaminándome hacia el cauce del arroyo de los Barrios que vuelvo a cruzar sin problema alguno.





Una hora y cuarenta y cinco minutos después de abandonar Villanueva de Campeán y recorrer 5,6 Km, finaliza la llanura y un “nuevo miliario” marca la dirección y comienza un poco de ascenso.





Abajo a la izquierda va quedando la población de San Román, a la que realmente hemos circunvalado por la derecha. La diferencia de distancia a recorrer entre las opciones de pasar por esta población (2,2 Km) o no pasar por ella (1,8 Km), es de 400 metros de incremento al recorrido realizado.







El ascenso se prolonga durante 1,4 Km sin un desnivel excesivo, hasta que unos metros antes de salir a la carretera ZA-305 hay un mojón que nos indica el giro de 90º a la izquierda. Aquí, antes de acceder a dicha carretera, hago un pequeño descanso desde donde ya puedo visualizar en el horizonte la población de Zamora.





Después del giro indicado hacia la izquierda. Apenas unas decenas de metros y se accede a la carretera ZA-305 que procede de San Marcial. Tal y como indica el mojón y la flecha amarilla, se ha de girar 90º a la derecha y caminar por el arcén de la carretera.





Aunque esta carretera no es de tráfico excesivo, es conveniente caminar por la misma con precaución. El recorrido por esta zona asfaltada se mantendrá durante 1,1 Km, al cabo de los cuales se abandona definitivamente esta carretera por la izquierda.

Ahora se ha de continuar por la pista que aquí se inicia, estando señalizado el desvío con uno de los nuevos miliarios graníticos adornado con bordón y calabaza.







Ya en descenso hacia la aparentemente próxima ciudad de Zamora, un grupo de “bicigrinos” avisan de su presencia y me adelantan, lógicamente pierdo de inmediato la visión de los mismos y continúo mi caminar animado por la visión de la ciudad a la que me dirijo.







De nuevo en zona llana el caminar se vuelve lento y pesado sobre todo por la hora en la que el sol está en su máximo esplendor, la verdad es que se deja notar.

Llego a un nuevo cruce de caminos señalizado con el “nuevo miliario granítico” y una flecha amarilla que indica continuar por la izquierda unos metros, aunque ya con la visión directa de un polígono industrial al fondo y que se ha de bordear por la derecha.







Una nueva recta, aunque en esta ocasión de solo 900 metros, nos lleva a cruzar el arroyo del Perdigón, antes de girar de nuevo a la derecha, existiendo en la misma esquina del recodo un pequeño monumento denominado El Brocal de las Promesas.





Este sencillo monumento formado por tres placas de piedra granítica verticales y un semiderruido brocal de pozo, con una placa de granito con una inscripción en la que se anima al peregrino “a dejar la promesa que quiera”, según texto de A. Ramos de Castro.

Aunque por desgracia el vandalismo y la falta de conservación están dando buena cuenta del brocal del pozo, en esta ocasión repleto de suciedad y con placas rotas.





Después de 1,9 Km se llega al cruce con el asfalto que conduce al polígono industrial Los Llanos, que se sitúa en el margen izquierdo. Desgraciadamente al ser día festivo está todo cerrado, incluso el único local en el que podría tomar alguna bebida refrescante, pues el sol es abrasador por estas llanuras, aunque ya con la vista puesta en la próxima zona edificada.





Todavía he de recorrer 1,0 Km por esta amplia pista de tierra hasta llegar a la siguiente zona edificada, se trata de una explotación ganadera de grandes proporciones.

Aquí pueden surgir dudas de hacia dónde continuar, en mi caso así sucedió, pero siempre guiado por la dirección que marcaban las flechas amarillas, que indicaban tomar a la izquierda, dejando la explotación ganadera a la derecha, y caminar en ascenso por un camino, entre la citada explotación y una parcela a la izquierda vecina de la única vivienda existente, lugar donde me confirmaron que seguía la ruta correcta, a pesar de los diferentes carteles de prohibición indicando que es una vía privada.

Un centenar de metros después, este amplio camino vecinal recupera la horizontalidad y al final del tramo recto, ya se puede observar nuevamente la ciudad de Zamora. En el margen derecho del Camino ya encuentro amplias edificaciones de fincas de recreo que al menos palian la soledad del momento e incluso me cruzo con algún vehículo que por allí transita. Además, la presencia de señalización también me tranquiliza.





Después de 900 metros, ya en descenso, bordeo las instalaciones de una planta de suministro de material para la construcción, tomando la pista que continúa por la izquierda y dejando la planta de áridos y hormigones a la derecha.







Apenas un centenar de metros después llego al cruce con la carretera CL-527, divisando ya perfectamente el perfil de la ciudad antigua y sus edificaciones, accediendo así al núcleo urbano.

En el otro margen de la carretera, un cartel con peregrino, indica la ruta a seguir cruzando esta vía asfaltada.







Son las 14:15 horas y ya en área urbana, siento la necesidad de tomar algún líquido refrescante, pues el agua que aún transporto ha alcanzado una temperatura considerable. El primer bar que encuentro se llama Los Mellizos, allí me dejo llevar y después de despojarme momentáneamente de la mochila, me relajo disfrutando da varios refrescos que me hidratan y me permiten recuperar fuerzas.







Ya descansado y refrescado, me encamino en dirección al albergue de peregrinos, para lo cual desciendo en dirección al cauce del río Duero, desde cuyo margen puedo contemplar una espectacular imagen de la ciudad de Zamora con su casco histórico, del que sobresale la estructura del edificio de su catedral.





Se accede al casco histórico salvando el cauce del Duero a través del Puente de Piedra, denominado en la Edad Media Puente Nuevo. Con una longitud de 281 metros, aunque su origen es medieval, las múltiples modificaciones sufridas y las últimas intervenciones efectuadas entre 1905 y 1907 han dado lugar a su aspecto actual.





En estas últimas actuaciones del siglo XX, no solo se sustituyó el pretil de piedra por una barandilla de metal, sino que también eliminaron sus dos torres, con el fin de ampliar la anchura de su tablero y facilitar así el acceso de vehículos a la ciudad desde el sur.







Finalmente llego a las puertas del Albergue de Peregrinos de Zamora donde encuentro una nutrida presencia de peregrinos que guardan turno hasta su apertura que se produce en breves momentos.

Solo distingo la presencia de dos peregrinos españoles, la pareja balear, ya que el resto son peregrinos italianos y de países nórdicos.

Este sensacional edificio, restaurado e inaugurado en enero de 2008, sencillo y funcional, con una ubicación excepcional en pleno casco histórico.







Espero mi turno para registro y acceso al albergue. Finalmente, se me asigna una litera baja en una habitación con una capacidad para ocho peregrinos, con aseos incorporado dentro de la misma habitación, aunque en con total independencia.

Todos los peregrinos de esta sala son extranjeros. Las vistas desde el balcón de que disponemos son excepcionales, con la imagen del río Duero y el Puente de Piedra.





Aquí tuve la suerte de conocer a dos hospitaleras voluntarias, Edith (inglesa) que abandonará los próximos días su estancia en el albergue y Trini (del mismo Bilbao) que se incorpora precisamente hoy.

Pronto tuve la satisfacción de compartir alojamiento con tres nuevos peregrinos, se trata de tres “chavales” septuagenarios, a los que aprecio y admiro, del mismo Bilbao, con quienes ya coincidí en Salamanca. Hoy solo hemos tenido ocasión de saludarnos.

Una vez instalado y aseado, me dediqué a descansar tranquilamente en la litera hasta la hora apropiada para hacer una merienda cena.

Esta ciudad, ya por mi conocida, bien merece una visita reposada en caso de ser la primera vez que se visita, no siendo mi caso.

El albergue se encuentra a dos centenares de metros del Parador de Turismo Condes de Alba de Aliste, hacia allí me encamino hasta llegar a la colindante Plaza de Viriato desde donde me dirijo a través de la calle Ramos Carrión hasta la Plaza Mayor.

En esta coqueta plaza, se encuentra la sede del Ayuntamiento Viejo, así como el edificio románico de la Iglesia de San Juan Bautista, cuya construcción se inició al parecer en el siglo XII, si bien sus obras se prolongaron durante los siglos XIII y XIV.





Ya entrada la tarde me encamino hacia la conocida zona de tapeo de Zamora situada al final de la calle Santa Clara. Por callejuelas como la de Las Flores de San Torcuato, del Aire, de Alfonso de Castro y demás callejas aledañas, se puede realizar una buena prueba gastronómica.

Aquí disfruté de especialidades de la tierra con varias cervezas que me permitieron recuperar la ausencia de comida del mediodía.







Después de visitar distintas tascas, decido dar por finalizado este festín gastronómico e inicio el regreso al albergue, no he de olvidar que la hora de cierre son las 22:00 horas.

Tranquilamente regreso sobre mis pasos cuando todavía no ha anochecido, disfrutando del entorno y los maravillosos edificios existentes como el que sale a mi paso por la Plaza de Zorrilla y denominado Palacio de los Momos, cuya obra original se realizó a finales del siglo XV o principios del siglo XVI. Actualmente alberga las instalaciones de la Audiencia Provincial, de ahí que también se conozca como Palacio de Justicia.







Todavía es temprano cuando regreso al albergue, lo que me permite disfrutar de sus instalaciones, incluyendo la amplia terraza de la planta baja, donde aprovecho para actualizar mis apuntes y disfrutar del entorno.

El tañido del pico de la cigüeña y su proximidad despiertan mi interés, ya que se encuentra situada en la espadaña del campanario de la Iglesia de Santa Lucía, sobre cuya estructura ha construido el nido.







Después de recorrer las instalaciones del albergue, incluida la planta sótano, en la que está situada la sala de descanso también utilizada como comedor, retorno a la planta baja en la que se encuentra mi litera.

A estas horas ya están tanto Edith como Trini procediendo al cierre del albergue, así que aproveché para comentar la visita realizada a la zona de tapeo de Zamora y algunas de las anécdotas vividas teniendo en cuenta que para Trini es su primer día como hospitalera.

Finalmente decido retirarme a descansar, así que me despido de ellas, aunque todavía mañana volveremos a coincidir en el desayuno que desinteresadamente ofrece el albergue.



Mi sugerencia:¡Zamora bien merece un día! En cuanto a la etapa, es conveniente y apropiado realizar el recorrido de Salamanca a Zamora en tres etapas





Albergues de la Etapa y otros alojamientos:

Villanueva de Campeán:
-Albergue de Peregrinos de Villanueva de Campeán
    Localización: Calle Callejón del Señor, 4
    Propiedad y Gestión: Municipal
    Tel.: (+34) 620 235 322
    Inaugurado en Mayo de 2005

-Albergue Vía de la Plata
    Localización: Calle Calzada, 8
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 630 980 967
    Inaugurado en 2009

-La Posada del Buen Camino***
    Localización: Calle Cruz 2
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 560 692 / (+34) 620 235 322



Zamora:
-Albergue de Peregrinos de Zamora
    Localización: Calle Cuesta de San Cipriano
    400 metros al sur de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Municipal
    Tel.: (+34) 980 50 94 27
    Inaugurado el 26 de Enero de 2008

-Residencia Juvenil Doña Urraca
    Localización: Calle Villalpando, Nº 7
    500 metros al noroeste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 51 26 71



-Pensión Oasis
    Localización: Calle Churruca 58
    300 metros al sur de la Plaza Mayor, a la salida de la población
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 524 205

-Pensión El Jardín
    Localización: Plaza del Maestro, 8
    600 metros al noeste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 531 827 / (+34) 636 72 45 16

-Pensión Padornelo
    Localización: Calle Aire, 4
    650 metros al noreste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 53 20 64

-Pensión Infinitun Zamora Suites
    Localización: Calle Regimiento de Toledo 21
    1,3 Km al noreste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 655 295 878 / (+34) 639 817 191

-Pensión Marta
    Localización: Calle San Blas, 13A, 1º
    1,5 Km al norte Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 654 565 682



-Hostal Don Rodrigo*
    Localización: Calle Virgen de la Concha, 5
    350 metros al norte de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 535 123 / (+34) 607 448 482

-Hostal Gemi*
    Localización: Calle Juan II, número 10A, 1º
    1,2 Km al noreste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 65 07 06 / (+34) 682 88 12 70



-Hostal Bajo la Muralla**
    Localización: Calle La Feria 5-7
    220 metros al noroeste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 530 769

-Hostal Chiqui**
    Localización: Calle Benavente, 2, 2ª planta
    450 metros al noreste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 531 480



-Hotel Trefacio*
    Localización: Calle Alfonso de Castro, 7
    550 metros al noreste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 509 104

-Hotel Vía de la Plata*
    Localización: Avenida Cardenal Cisneros, s/n
    2,2 Km al norte de la Plaza Mayor, a la salida de la población
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 16 58 16



-Hotel Jarama**
    Localización: Calle de Villalpando, 14
    550 metros al norte de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 51 32 27

-Hotel Hostería Real de Zamora**
    Localización: Calle Cuesta de Pizarro, 7
    650 metros al suroeste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 045 031

-Hotel Puente de Piedra**
    Localización: Plaza Belén, 3
    900 metros al suroeste de la Plaza Mayor, en la ribera del Duero, al pasar el Puente de Piedra
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 533 267 / (+34) 685 958 831 / (+34) 685 958 826



-Hotel San Gil Plaza***
    Localización: Plaza del Maestro Haedo, 5 (antigua Plaza de San Gil)
    220 metros al este de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 04 84 70 / (+34) 675 44 92 78

-Hotel Doña Urraca***
    Localización: Plaza La Puebla de Sanabria , 8
    400 metros al noroeste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 16 88 00

-Ares Hotel***
    Localización: Plaza Puentica 2
    400 metros al oeste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 55 19 83 / (+34) 609 27 55 99

-Hotel Rey Don Sancho***
    Localización: Avenida de Galicia s/n
    2,1 Km al norte al norte de la Plaza Mayor, a la salida de la población
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 523400



-Parador de Turismo Condes de Alba y Aliste****
    Localización: Plaza de Viriato, 5
    210 metros al noreste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 514 497

-Hotel Horus Zamora****
    Localización: Plaza del Mercado, 20
    400 metros al este de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 508 282

-Hotel NH Palacio del Duero****
    Localización: Plaza de la Horta, 1
    500 metros al sureste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 508 262

-Abba Zenit Dos Infantas****
    Localización: Calle Cortinas San Miguel, 3
    600 metros al noreste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 50 98 98

-Hotel AC Zamora by Marriot****
    Localización: Avenida Principe de Asturias, 43
    1,3 Km al noreste de la Plaza Mayor
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+34) 980 55 79 40