EL CAMINO PORTUGUES DE LA COSTA




Día 4º: Marinhas - Viana do Castelo: 21,09 Km





Son las 07:15 horas, todavía de noche, cuando abandono el albergue para descender hasta la zona comercial de la población (junto a la carretera N-13) donde ya hay un local abierto para desayunar.

Ya con las primeras luces del día asciendo y después de desayunar, asciendo por la “Avenida da Igreja” que prosigue por la “Rua Conde de Madimba”, hasta que después 500 metros caminando en dirección noreste, tomo a la izquierda por la “Rua de São João”, por la que continúo ahora en dirección norte.





El itinerario discurre a través de una especie de zona residencial en la que se alternan las edificaciones, en paralelo a la costa, aunque a una distancia más que prudencial de casi dos kilómetros.

Serán solo 290 metros por esta “Rua de São João” hasta que la misma finaliza ante la “Capela de São João do Monte”, cuya explanada delantera está presidida por un cruceiro del mismo nombre que la capilla.





Prosigo caminando, de acuerdo con la indicación de las flechas amarillas, junto al lateral derecho de la capilla, donde comienza la “Rua da Ponte Nova”, contemplando durante el recorrido, a través de las amplias zonas libres de edificaciones que se alternan con las viviendas que salpican esta ladera del monte, el azul océano en la lejanía y las tablillas informativas de las distancias a distintas poblaciones y del recorrido del Camino.





A medida que avanzo por esta calzada adoquinada, me preceden una pareja de peregrinos que también ha pernoctado en el albergue, cuando comienza a caer una suave lluvia que me obliga a proteger la mochila con la funda impermeable.





Sin embargo, la lluvia arrecia y ya no solo debo cubrir la mochila, sino que también yo he de protegerme con el chubasquero, al igual que los peregrinos que me preceden.





La lluvia no cesa, lo que me impide apreciar la belleza de la zona, limitándome exclusivamente a contemplar las edificaciones entre las que va serpenteando el camino por estas zonas urbanas.

Después de 1,1 Km desde que pasé ante la “Capela de São João”, llego a las inmediaciones de otro edificio religioso, en esta ocasión se trata de la “Igreja Parroquial de Belinho”. Una amplia explanada se extiende ante su fachada principal, presidida por un cruceiro.

De estilo arquitectónico neoclásico fue inaugurada en 1897. Su fachada principal tiene base de cantería y una hornacina que alberga la imagen del patrón San Pedro. En cuanto al campanario, adosado y de tres plantas, reloj y campana, rematado por una cúpula bulbosa.





La lluvia no cesa y la iglesia está cerrada, así que continúo caminando ahora por esta “Rua Padre Avelino Alves Sampaio” que aquí se inicia, a las puertas de esta iglesia y de la” Junta de Freguesia de Belinho”, situada frente a la iglesia.

Solo 250 metros después de iniciar la andadura por esta calle en dirección norte, una nueva peregrina me precede, lógicamente equipada con ropa de lluvia.





Otros nuevos 500 metros y finalizo la andadura por la “Rua Padre Avelino Alves Sampaio", a la vez que la inicio por “Rua Jose Gonçalves Pereira”, ya en la nueva “Freguesia de Antas”, con sus fronteras marcadas por el océano atlántico y por el río Neiva, perteneciente al “Concelho de Esposende” cuyo extremo norte ocupa, y como vengo comprobando a lo largo de la etapa, unas “freguesias” enlazan con otras y las edificaciones apenas sufren pequeñas interrupciones durante el recorrido.





En el recorrido por el núcleo urbano vuelvo a encontrarme con dos peregrinos, padre e hija, con quienes ya coincidí comiendo en Fão.





Salgo del área urbana, siempre manteniendo la dirección norte, y ahora comprendo cuál era su principal fuente de riqueza en otros tiempos, además de la playa y los pinos, precisamente la agricultura tal y como puedo comprobar en los bellos mosaicos que conforman sus campos.





Abandono los adoquines y comienzo a transitar durante 650 metros por una cómoda pista de tierra, sin barro ni charcos a pesar de la lluvia, con unos preciosos parajes a veces encajonados entre paredes de enormes bloques de piedra.





Finalmente desemboco en la carretera asfaltada M-546, frente al edificio de la “Capela de Nossa Senhora dos Remédios”, junto a la que se ha acondicionado una sencilla y cómoda área de descanso para peregrinos.





Tomo a la izquierda por esta carretera que se adentra en Estrada, pequeña localidad perteneciente a Antas, y solo unos metros más adelante observo la existencia de un cruceiro.





Solo 220 metros caminando por el asfalto de esta carretera, cuando de acuerdo con las indicaciones del Camino debo abandonarla por la derecha, para continuar por la “Travessia do Ferreiro” de 150 metros de longitud y que termina en la carretera N-13 (dentro del área urbana) que he de cruzar para continuar ahora por la “Rua da Calvalha” en la que después de 250 metros desparece el piso adoquinado para continuar caminando por pista de tierra.





Esta pista de tierra nos ira aproximando a la ribera del Neiva a través de un frondoso bosque y siempre acompañados por la señalización de las flechas amarillas del Camino.

Después de 300 metros por esta bella pista caminando en dirección norte, tomamos dirección oeste, para iniciar así el descenso hacia el cauce del río Neiva, precedido por dos peregrinos.





Apenas un centenar de metros más adelante, una nueva bifurcación con un monolito del Camino, donde un pequeño montículo de piedras depositadas por el paso de peregrinos, es señal que no deja a lugar a dudas de que llevamos el itinerario apropiado. Aquí, en esta bifurcación tomamos a la izquierda, tal y como la flecha amarilla señaliza en el monolito existente.





El recorrido por esta senda boscosa es una verdadera maravilla, por suerte la lluvia ha cesado, lo que me permite descender, con precaución, salvando algunas zonas rocosas existentes en ocasiones, pero disfrutando de la belleza del entorno y de la tranquilidad que transmiten las flechas amarillas.





Prosigue el descenso, en ocasiones con el trazado algo más suave, aunque rodeado de helechos y la altura de los eucaliptos que intentan sobrevivir entre ellos consiguiendo la mayor altura en este idílico paisaje.





En ocasiones, por esta senda ribereña, nos acercamos demasiado al cauce del río Neiva, debiendo extremar las precauciones, pues el caudal es más que respetable y un resbalón podría ser peligroso.





Son las 09:30 horas pasadas cuando llego a la pasarela que permite salvar el cauce del río, por suerte la corriente no es excesiva y el nivel del agua no supera el de las losas de piedra de la pasarela, por lo que puedo cruzar perfectamente. No obstante, junto a la pasarela existe una especie de boya salvavidas para utilizar en caso de emergencia.





Desde el centro de la pasarela puedo admirar el amplio cauce del río y la represa construida para suministrar agua al molino existente en el margen izquierdo.





Ya desde el otro margen, ahora por tierras del distrito de Viana do Castelo después de cruzar el cauce del río (frontera geográfica de distritos) abandonando el distrito de Braga, puedo contemplar la pasarela y el edificio de lo que en otro tiempo pudo ser un molino, denominado “Casa de Azenha Branca”, ejemplo de los muchos existentes por la ribera de este río, en la mayoría de los casos solo se mantienen algunas ruinas de los mismos.





Comienzo el ascenso y compruebo con satisfacción que no soy el único peregrino del lugar, lo que siempre transmite cierta tranquilidad en estas zonas tan aisladas y solitarias.





El ascenso a través de ahora una amplia pista de tierra en los 270 metros iniciales, con una suave y cómoda pendiente, pasa después el firme de tierra a convertirse en una pista empedrada, en la que, a través de sus 330 metros de longitud en suavizada pendiente, me lleva hasta el cruce con la carretera asfaltada denominada “Avenida de Moldes”.

En este punto, en una amplia explanada, se encuentra la “Capela de Nossa Senhora de Guadalupe”, junto a la que existe un pequeño quiosco donde poder adquirir algunas bebidas y alimentos.





Prácticamente enfrente dela Capilla, en el otro margen de esta vía asfaltada, se encuentran las instalaciones del “Albergue Dom Nausti”, pero todavía no ha llegado el momento de finalizar la etapa, así que prosigo caminando.





Después de 140 metros ascendiendo en dirección norte por el asfalto de esta “Avenida de Molde”, la abandono por la derecha, tomando una vía adoquinada denominada “Rua das Azenhas” en la que me adelantan tres de los peregrinos menorquines que me seguían.





Al cabo de 92 metros abandono esta “Rua das Azenhas” por la izquierda, para mantener la dirección norte caminando ahora por la “Rua Real” solo durante 40 metros, al cabo de los cuales tomo la vía de la izquierda, denominada “Travessia de Conticho”, siempre ascendiendo en dirección norte hasta retornar después de 210 a la vía asfaltada “Avenida de Moldes”.

Tomo a la derecha ascendiendo por esta avenida en dirección norte durante 150 metros, desembocando al cabo de los mismos en la denominada “Avenida Central” (coincidente con el trazado de la N-13-3) donde tomo a la derecha de acuerdo con la señalización del Camino e inmediatamente desviarme a la izquierda por la pista adoquinada de “Travessia de Santiago”.

Asciendo por esta travesía durante 170 metros que me llevan a desembocar en una vía asfaltada más amplia denominada “Rua de Santiago”, donde tomo a la derecha, manteniendo así la dirección norte, de acuerdo con la señalización del Camino.





Nada más incorporarme a esta vía, llama la atención una pequeña hornacina con la imagen de un Cristo Crucificado.





Me precede una pareja de peregrinos con quienes ya he coincidido en varias ocasiones.





Prosigo ascendiendo por esta “Rua de Santiago” serpenteando en el ascenso, aunque manteniendo la dirección. Durante el recorrido por esta vía, que después de 300 metros me llevará ante las puertas de la “Igreja de Santiago de Castelo de Neiva”, puedo contemplar un sencillo monumento que acoge la imagen del Apóstol Santiago.





Son un poco más de las diez horas cuando finalizo prácticamente el ascenso ante la fachada de esta “Igreja de Santiago de Castelo de Neiva”, viendo como algunos peregrinos acceden al templo, mientras otros realizan un breve descanso, pues la zona dispone de una fuente de agua e instalaciones con aseos públicos.

Esta iglesia tiene el privilegio de ser el primer templo consagrado a Santiago fuera de España, allá por el año 862.





En cuanto a su fachada principal, está rematada por un arco de medio punto y un gran ventanal para iluminación interior, seguido de una hornacina con la imagen de Santiago. Está delimitado por pilastras de cuña que rematan en pináculos piramidales.

A la derecha y en el mismo plano de la fachada principal, el campanario cuadrado de tres plantas separadas por un friso.





En cuanto al interior, formado por tres naves, una central y dos laterales, unidas por cinco arcos de medio punto y un toral, también de medio punto que da acceso a la capilla mayor.





La capilla mayor presenta un retablo íntegramente dorado y la mitad de las paredes están revestidas de azulejos, similar a las naves laterales.





Una vez finalizada la visita al interior del templo, comparto unos minutos con los peregrinos menorquines en la explanada exterior, colaborando en la realización de la fotografía que tengo ante la portada de esta iglesia.





Hay que proseguir la etapa, además la lluvia ha cesado, así que abandono el lugar tomando la salida que se inicia en el lateral del aparcamiento existente frente a la fachada `principal, tal y como señalizan las flechas y vieira amarillas del Camino, ascendiendo por una pista de tierra.





Comienzo un breve y pronunciado ascenso por esta pista de tierra que me adentrará en una bonita zona boscosa, rodeando inicialmente el perímetro posterior de la iglesia y cementerio, para continuar el recorrido siguiendo la orientación noreste en ocasiones a través de bonitas sendas.





En otros momentos caminando por pistas de tierra, con algunas zonas embarradas debido a las recientes lluvias, aunque por ahora ha cesado la lluvia, precediéndome de nuevo un peregrino.





Después de 15 minutos caminando por esta zona boscosa, llego ante una gran losa del Camino que indica los 187 kilómetros que restan hasta Santiago de Compostela, encontrándome con una pareja de peregrinos que colaboramos en hacernos algunas fotografías.





Después de 1,2 Km a través de esta zona boscosa, ya en las inmediaciones de las edificaciones del barrio de Monte, me sorprende la existencia de un pequeño y rústico espacio cubierto con lonas y algunas sillas para descansar, donde poder consumir algún refresco o alimento, a cambio de un donativo, como ya hacen un par de peregrinos. Se trata de la denominada Casa de Albinio.





Inmediatamente accedo a la zona urbana del barrio de Monte (perteneciente al municipio de Neiva). Ha sido un recorrido de 1,3 Km a través esta bonita zona boscosa hasta llegar a las edificaciones de este barrio de Monte.





Sin embargo, este trayecto urbano apenas dura 250 metros, al cabo de los cuales, de acuerdo con la señalización del Camino tomo a la izquierda por la denominada “Rua Caminho de Santiago”. Recuperando de nuevo la dirección norte.





Me adentro de nuevo por zona boscosa, a través de pistas y sendas hasta que después de 20 minutos y recorrer 1,3 Km, la pista desemboca junto a las edificaciones del Monasterio de San Romão.





El “Mosteiro de São Romão do Neiva” se fundó en el siglo XI y posteriormente restaurado bajo la regla benedictina poco antes de 1087, fecha en que se consagró la iglesia abacial.

En el siglo XVI pasó a ser gobernado por abades comendadores, hasta que la congregación de “São Bento” tomó posesión de él en 1569.

Sería en la segunda mitad del siglo XVIII cuando la comunidad benedictina derribó por completo el edificio románico, erigiendo el nuevo templo y su espacio conventual de rasgos manieristas.

El decreto de 30 de mayo de 1834, incluido en la “reforma eclesiástica general”, abolió todos los conventos, monasterios, colegios, hospicios y casas religiosas de todas las órdenes religiosas, permaneciendo abiertas las casas religiosas hasta la muerte de la última monja, fecha de clausura definitiva.

Al parecer, “por accidente”, también fueron nacionalizadas las oficinas de registro monásticas que conservaban los títulos de propiedad y la documentación imprescindible para la administración de dichos bienes. Estas transferencias, en la mayoría de los casos, no tuvieron éxito, resultando perdidas irremediables en la ocupación de estas oficinas de registro.

La fachada del templo presenta un profuso conjunto decorativo de líneas manieristas, repleto de volutas, vueltas y pináculos de clara inspiración en las corrientes flamencas.





Frente a la fachada y explanada delantera del monasterio, una gran Cruz preside el acceso de una interminable escalinata que asciende hasta la “Capela da Senhora do Crasto”. Sin embargo, no me encuentro con ánimos para realizar una visita a esta capilla a través de semejante escalinata.





El edificio monástico está cerrado, así que decido continuar caminando mientras observo la fachada lateral del mismo y el cruceiro que preside la placeta allí situado.





Tomo la carretera de la izquierda y en la bifurcación existente, ocupando el triángulo que conforma esta bifurcación, existe una sencilla y espléndida área de descanso.





Camino a través de esta vía denominada “Avenida do Mosteiro” y después de 160 metros caminando en dirección norte llego hasta una rotonda que he de cruzar perpendicularmente, rodeando la glorieta según marcan las flechas amarillas.





Prosigo caminando por esta “Avenida do Mosteiro” accediendo después de 300 metros a los inicios del núcleo urbano de la población de “Chafé”.





Pocos metros más adelante, ya caminando por la vía denominada “Strada do Senhor do Socorro”, se encuentra en el margen izquierdo la “Capela do Senhor do Socorro”.





Sin embargo, solo 210 metros más adelante caminando por esta estrecha vía asfaltada, existe un desvío señalizado a la izquierda que se agradece, puesto que al menos evitará el peligroso tráfico de esta estrecha vía hasta llegar al centro de la población.





Llego al centro de la población, ante la fachada de la “Igreja de São Sebastiao”, pequeña iglesia de estilo barroco, situada en su segunda y definitiva ubicación, ya que con anterioridad se encontraba más cercana a la costa, resultando muy dañada por las avalanchas y enterramientos de arena.





En cuanto a su interior, coqueto y con su altar mayor decorado con dorados y su techo abovedado con pinturas.





Es casi el mediodía, así que aprovecho la existencia de un bar (Pastelaria São Sebastião), para tomar una cerveza y un montado de jamón y queso.





Ahora hay que proseguir caminando, lo hago dejando atrás la iglesia y el bar, bordeando las paredes del cementerio y tomando la primera calle a la derecha, en dirección noroeste por “Caminho de Entre Quintas”, entre parcelas agrícolas con pequeñas edificaciones y continuos vallados. Después de 1,5 Km atendiendo a las constantes señalizaciones del Camino con flechas amarillas y carteles azules con flecha amarilla, llego a una nueva bifurcación perfectamente señalizada, cruzando la denominada “Avenida 9 de Julho” (vieja carretera M-544).





Solo 180 metros en dirección noreste, para inmediatamente tomar el desvío de la izquierda a través de la “Rua da Casa da Fabrica”, que ya en dirección noroeste, me conduce hacia el centro de la inmediata población.





Ahora serán 600 metros a través de esta “Rua da Casa da Fabrica”, ya prácticamente en zona urbana, evitando este recorrido el tener que caminar por asfaltada vía paralela de la “Vieja Strada m-544”, con mucho más tráfico.

Finalmente llego al centro de la población de Vila Nova de Anha (antigua Anha), lugar en que se encuentra la “Igreja Matriz da Paroquia de São Tiago”, con un pequeño muro formando un atrio alrededor de la Iglesia. Tiene planta rectangular, con frontón contra curvado y delimitado por pilastras de cuña.





Al encontrarse abierta puedo acceder a contemplar su interior, en el que su altar está precedido por cuatro escalones, con un cuidado retablo dorado y flanqueado por dos hornacinas.





Frente a esta “Igreja Matriz”, se encuentra la “Capela do Senhor dos Aflitos”, la fachada se divide en dos paños, presentando el superior con un frontón curvilíneo interrumpido por la Cruz latina y un gran ventanal que ilumina el coro alto. En la parte inferior destaca la portada principal de marco recto.





El interior de la capilla, es de una gran sencillez, aunque en estos momentos la mayor parte de la superficie de la capilla está ocupada con dos imágenes situadas en sus andas.





Atrás quedan la iglesia y la capilla, situado a la puerta de “A Tasca Do Luis”, habría sido buen sitio para realizar un breve descanso, pero no quisiera prologar más la etapa, así que hay que continuar.





Frente a la tasca, una pequeña placeta, al inicio de otra calle, acoge un bonito cruceiro.





Avanzo ahora apenas una decena de metros por la “Avenida 9 de Julho” en dirección norte y tomo a la derecha en la rotonda presidida por la farola para continuar, de acuerdo con los letreros indicadores, por la adoquinada vía denominada “Rua Dom José de Alpuim”, bordeando el lateral izquierdo del bar “O Nosso Café”.





Inicio así la salida de la población de Anha para continuar caminando, manteniendo la orientación norte y siguiendo la señalización del Camino, entre caseríos y parcelas agrícolas durante 500 metros hasta desembocar en la vía asfaltada denominada “Avenida da Estrada Real”, donde tomaré a la izquierda, dejando al frente la imagen de un cruceiro y la “Capela de Santo António”.





Prosigo caminando en suave ascenso por esta “Avenida da Estrada Real” y solo 220 metros después, hay un refrescante pilón de agua que hace las delicias de algunos peregrinos sumergiendo los pies o saciando la sed, sin embargo, yo lo dejo atrás y no me detengo.





Después de 700 metros por esta vía asfaltada corono la cima de este puerto, donde se instalado una cruz de piedra, que, junto a una hornacina, recuerda el lúgubre acontecimiento aquí sucedido.





Inicio el descenso por la calzada de esta carretera M544 hasta que 170 metros más abajo, una señal del camino me indica tomar la senda que sale a la derecha, lugar desde el que ya puedo contemplar ña primera vista panorámica de Viana do Castelo.





La senda apenas tiene una longitud de 100 metros, al cabo de los cuales me devuelve al asfalto de esta carretera, pero al menos me ha permitido evitar la peligrosa curva por la que continuaba la carretera.

Inmediatamente me adentro en el término de la “Freguesia de Darke” a través de esta carretera M544, bordeada por la izquierda por una zona de dunas que han progresado desde la costa, a pesar de la abundante vegetación que intenta frenar su movimiento. Desde aquí hay una mejor visión de la población final de etapa.





Otros nuevos 350 metros por esta carretera M544, al cabo de los cuales tomo la pista que parte a la derecha, en dirección noroeste durante 240 metros, para proseguir después a través de una senda otros 190 metros hasta finalizar en la rotonda que en este punto describe la carretera N13.

A partir de aquí, una gran recta con aceras laterales, me conduce bordeando la zona urbana de Darque, especialmente por el margen derecho, limitando la acera del margen izquierdo por el que camino por zonas como una gran explanada en la que hoy se está celebrando el mercadillo semanal.

Finaliza esta recta después de 1 kilómetro en otra rotonda, presidida por el monumento al pescador del río Lima, dándome acceso en curva ascendente a la entrada del puente por la “Avenida de Dom Alfonso III” sobre el río Limia.





Ya caminando por la plataforma de este Puente de Eiffel sobre el río Limia puedo apreciar la magnitud de esta construcción.

Construido en la época de la arquitectura del hierro diseñado por la Casa Eiffel, además de permitir sustituir el antiguo puente de madera que unía “São Bento” en Viana do Castelo (San Beato) con la “Darque” en la orilla izquierda del río, propició la comunicación mediante ferrocarril.

Este puente tiene 563 metros de longitud y 6 metros de ancho, siendo necesarios 2.000.000 de kilos de hierro para construir los seis tableros que se apoyan en nueve pilares de cantería de granito, cuyos cimientos alcanzan los 22 metros de longitud.





Durante el recorrido por el puente pude contemplar la fabulosa imagen del cauce del río aguas arriba.





Así como también disfrutar de la imagen portuaria del estuario del río desde la otra vertiente del puente.





Son las 13:45 horas cuando nada más cruzar el puente, me encuentro frente a la edificación que acoge el “Albergue de São João da Cruz dos Caminhos”, solo me queda localizar el paso peatonal subterráneo que me permita cruzar a la otra vertiente de esta “Avenida de Dom Alfonso III” por cuyo centro discurre la vía férrea.





Son las 14:00 horas cuando accedo al albergue y después de cumplimentar mi inscripción y abonar el importe requerido, me acompañan hasta la planta donde me hospedaré, en una habitación maravillosa, ¡dispone de camas!, solo hay seis camas y todas con su armario. ¡Todo un lujo! Soy el primer peregrino de esta sala.





Después de instalarme y asearme, salgo del albergue para intentar tomar algún alimento antes de que sea más tarde, pues junto al albergue, comprobé al llegar, la existencia de un bar que al menos tenía bocadillos, se trata de la “Confeitaria Flor” donde efectivamente degusto un buen bocadillo de jamón y unas cervezas, de manera relajada en una de las mesas que tiene en la pequeña terraza del establecimiento en la misma acera.

Regreso de nuevo al albergue en el que se había suministrado un código de acceso, permitiendo una mayor libertad de movimientos.

El albergue está situado en el complejo constituido por la “Igreja y Convento do Carmo”, pertenecientes a la Orden de los Carmelitas Descalzos, perfectamente acondicionado en un entorno privilegiado.

Pronto llega la primera peregrina, se trata de Misaki, ya conocida en el albergue de Marinhas, se instala a la izquierda de mi cama. Posteriormente llega otra chica y una pareja de peregrinos. Finalmente seremos seis los ocupantes de la sala, completando su capacidad.

Ya entrada la tarde me decido a salir para conocer algo de esta población, así se lo comento a Misaki quien se brinda a acompañarme, además de informarme de la presencia en el albergue, en otra sala, de los cinco peregrinos menorquines.

Descendemos por las escalinatas del albergue y no desaprovechamos la ocasión para mostrar la decoración de este histórico escenario.





Antes de adentrarnos en el centro de la población, aprovechando que la iglesia del convento está abierta por un acto religioso, accedemos a su interior.

Construida en la primera mitad del siglo XVII, de estilo manierista y barroco, con planta de cruz latina, su interior está decorado con azulejos y tallas doradas como en el altar.





Finalizada esta breve visita, nos encaminamos en dirección al centro urbano hasta llegar a la “Praça da Republica”, corazón de la ciudad.

Viana do Castelo, con sus aproximadamente 30.000 habitantes, es una de las ciudades más bonitas del norte de Portugal. Su participación en los descubrimientos portugueses, y más tarde, en la captura del bacalao, manifiestan su tradicional unión con el mar.

Uno de los más bellos rincones de la plaza es el conformado por la fuente circular, “Antigos Paços do Concelho” y la “Igreja Santa Casa da Misericordia”.

“Antigos Paços do Concelho”, el edificio está construido en la austera piedra de granito, formando el piso bajo un alpende delimitado por tres arcos ojivales a los que corresponden, en el piso intermedio, tres ventanas salientes.

Sobre la ventana de en medio se muestran esculpidos el escudo regio, la esfera armilar y una nave, símbolo de Viana, que debe gran parte de su prosperidad al mar.

En cuanto a la iglesia y el edificio de la Misericordia, datan del siglo XVI. El edificio es un ejemplo único de la arquitectura civil, de inspiración renacentista y manierista, con influencias italianas y flamencas.





Continuamos caminando en dirección oeste por estas céntricas calles, cruzando la “Avenida dos Combatientes da Grande Guerra” para proseguir por la “Rua Manuel Espregueira”, llegando así ante la fachada de la “Igreja e Convento de São Domingos”.

La iglesia de Santo Domingo o de Santa Cruz, pertenecía al antiguo Convento de Santa Cruz. Es un templo construido en el siglo XVI.





En su interior pueden contemplarse varios altares cuyos retablos representan el más puro estilo portugués en talla dorada.





Decidimos retornar sobre nuestros pasos para no olvidarnos de pasar por una de las más afamadas pastelerías de Viana do Castelo a la que antes no habíamos podido acceder debido al gran número de personas que esperaban su turno. Se trata de la “Pastelaria Cafetaria Manuel Natário”, que ofrece unos productos que hacen las delicias de Misaki, así como el producto típico denominado “Biscoitos de Viana”.

Proseguimos dando un paseo callejeando hasta llegar a las inmediaciones del puerto, donde una sencilla explanada acoge la “Chafariz de Mercurio” (Fuente de Mercurio), rodeada por la “Capela da Nossa Senhora das Candelas” y el Registro Civil de Viana.





Continuamos caminando a la espera de la hora de apertura de establecimientos para la cena, recorriendo la “Rua Grande”, calle comercial que se encuentra decorada con una gran cantidad de paraguas colgados, que además de su alegre colorido, protegen en épocas soleadas de los rayos de sol. No obstante, se considera a la población de Águeda como el símbolo más representativo en tierras portuguesas de esta curiosa exposición callejera de paraguas.





Como la idea, al menos por mí parte, era poder cenar de una manera más sería que la comida realizada con un bocadillo, he localizado un establecimiento que, por las fotos y comentarios expuestos en la red, presenta una opción apetecible en cuanto a variedad y precios.

Decididamente tanto Misaki como yo nos decantamos por esta posible opción y nos encaminamos en busca del establecimiento denominado “O Tabernão”, situado en “Largo Infante Dom Henrique, 42” a menos de 100 metros de los muelles del estuario del río Limia. No nos encontramos a mucha distancia.





Somos los primeros clientes, anticipándonos para no regresar demasiado tarde al albergue, así que tenemos espacio dentro del local donde elegir la mesa que consideramos oportuna, en el centro de la sala, bajo la enorme pizarra que contiene la amplia oferta del lugar.





Al fondo del local, después de la barra, se encuentra la cocina, pudiendo apreciar por la decoración de la zona de barra cuál es la afición de su propietario: el futbol.





Mientras tomamos alguna bebida, intentamos decidir que tomar entre la amplia y variada oferta, para lo que contamos además con la inestimable colaboración del propietario: Carlos.

Finalmente decidimos comenzar con una reconfortante sopa de verduras de elaboración casera, toda una delicia para comenzar a restaurar nuestras menguadas fuerzas.





Proseguimos degustando productos del mar, para eso estamos junto al Océano Atlántico, así que optamos por unos mejillones a la vinagreta (“mexilhões”) y unos calamares. Los mejillones excelentes y la fritura de calamar espectacular.





Continuamos con un plato de navajas (“navalhas”), con una salsa digna de mojar las mejores sopas de pan hasta agotarla.





Todo una suerte y acierto en la elección del local, en el que disfrutamos de unos productos y cocina sensacional, además de la atenta compañía y asesoría de Carlos, el propietario. En cuanto a la relación calidad precio, excepcional, además en la enorme pizarra de la pared están perfectamente definida toda la variedad de productos y sus precios.

Todavía no es muy tarde para la hora de llegada al albergue, por lo que prologamos la sobremesa en compañía de Carlos.





Nos comenta Carlos que recientemente había realizado algunos tramos de este Camino, pero en sentido inverso, siendo de gran ayuda su conocimiento y consejos para la etapa de mañana, recomendándonos el recorrido que discurre alejado de la costa, puesto que teníamos la duda razonable al respecto.

No son todavía las 21 horas cuando muy a pesar nuestro abandonamos el local, despidiéndonos de Carlos y su amabilidad, con los buenos deseos de que el Camino nos vuelva a reunir si así fuese posible. Gracias Carlos.

Retornamos tranquilamente al albergue, apenas distante 20 minutos caminando, en el que se ha incrementado la afluencia, ya nuestra habitación estaba completa, somos seis peregrinos, además de otro grupo de peregrinas en otra sala de esta planta, al igual que los menorquines.

Van a ser las 22 horas cuando definitivamente me retiro a descansar.



Mi sugerencia: Disfrutar del espectacular tramo junto al río Neiva y de la población de Viana do Castelo .



Albergues de la Etapa y otros alojamientos:

Antas:
-Antas Guest House
    Localización: Rua Barão de Maracaná, 4
    Junto al Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 962 319 979

-Residencial Reguenga
    Localización: Rua da Ribes, nº 4
    650 metrods al noreste del Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 253 873 214 / (+351) 932 538 713 / (+351) 932 538 712



Castelo do Neiva:
-Albergue de peregrinos Don Nausti
    Localización: Avenida de Moldes, 565
    Junto al Camino
    Propiedad: Municipal; Gestión: Hospitaleros voluntarios
    Tel.: (+351) 962 471 251
    Inaugurado en 2018

-Al Santiago
    Localización: Rua de Santiago, 313
    Junto al Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 964 560 104



Chafé:
-Casa do Campo do Forno
    Localización: Estrada da Amorosa, 350
    Junto al Camino: núcleo urbano
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 934 122 695

-Casa da Reina
    Localización: Caminho do Pardinheiro, nº122
    Junto al Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 925 001 161



Anha:
-Albergue Casa da Carolina
    Localización: Avenida 9 de Julho, nº 1590
    450 metros al noroeste del Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 969 004 514

-Quinta do Paço d'Anha
    Localización: Av. da Estrada Real, 2
    140 metros al este del Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel: (+351) 258 322 459 /(+351) 967 479 985



Darque:
-Camping Orbitur - Viana do Castelo
    Localización: Rua Diogo Álvares, 161
    1,7 Km al oeste del Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 322 167

-Residencial Don Augusto
    Localización: Travessa dos Antúrios,60/70
    Junto al Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 322 491

-Hotel FeelViana****
    Localización: Rua Brás de Abreu Soares, 222
    1,8 Km al oeste del Camino
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 330 330



Viana do Castelo:
-Albergue de peregrinos São João da Cruz dos Caminhos
    Localización: Rua do Carmo, 1
    Junto al Camino: al pasar el puente de Eiffel
    Propiedad y Gestión: Ordem dos Carmelitas Descalços
    Tel.: (+351) 258 822 264

-Albergue de Santa Luzia
    Localización: Monte de Santa Luzia
    En la cima del monte Santa Lucía; acceso por escaleras o funicular
    Propiedad y Gestión: Cofradía de Santa Luzia
    Tel.: (+351) 258 823 173 / (+351) 961 660 300
    Inaugurado en 2018

-Pousada da Juventude de Viana do Castelo
    Localización: Rua de Limia, 4900
    230 metros del Puente de Eiffel
    Propiedad y Gestión: Pública
    Tel.: (+351) 258 838 458 / (+351) 925 665 071

-Hostel Maçã de Eva
    Localización: Rua do Poço, 4900
    140 metros al sur de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 076 022

-Avenida Central Viana Hostel
    Localización: Avenida dos Combatentes da Grande Guerra, 49, 3º andar
    210 metros al sur de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 927 811 099

-Zimborio Guest House
    Localización: Rua Gago Coutinho, 26
    70 metros al este de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 938 354 863

-Casa de Hóspedes Dona Emília
    Localización: Rua Manuel Espregueira, 6
    90 metros al sur de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 964 685 942

-Enjoy Viana Guest House
    Localización: Rua Passeio das Mordomas da Romaria, 53
    150 metros al noroeste de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 914 668 475

-A Vianesa Guest House
    Localización: Rua Emídio Navarro, 35
    400 metros al norte de Praça da República: área urbana
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 965 415 431

-Hotel Laranjeira**
    Localización: Rua Cândido dos Reis, 45
    170 metros al noroeste de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 822 261

-Hotel Jardim**
    Localización: Alameda 5 de Outubro, 68
    350 metros al sur de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 828 915/6

-Hotel Calatrava**
    Localización: Rua Manuel Fiúza Júnior, 157
    550 metros al noreste de Praça da República: área urbana
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 828 911

-Hotel Margarida da Praça***
    Localización: Largo 5 de Outubro, 58
    300 metros al sur de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 964 926 995

-Hotel do Parque***
    Localización: Praça da Galiza
    180 metros al este del puente de Eiffel: área urbana
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 828 605 / (+351) 258 828 605

-Hotel Rali Viana***
    Localización: Avenida Afonso III, 180
    650 metros al norte de Praça da República: área urbana
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 829 770

-Hotel-boutique Fábrica do Chocolate****
    Localización: Rua do Gontim, 70-76
    500 metros al noreste de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 244 000

-Absoluto Design Hotel****
    Localización: Rua da Bandeira, 174
    350 metros al noreste de Praça da República: casco histórico
    Propiedad y Gestión: Privada
    Tel.: (+351) 258 404 596 / (+351) 934 998 862



Nota sobre alojamientos en Portugal:
- Bombeiros Voluntarios: no es obligación de este cuerpo el alojar peregrinos. Es necesario avisar con varios días de antelación y estar dispuestos a recibir una respuesta negativa. Su "colaboración" consiste en ofrecer un colchón o un espacio, ducha o acceso a casa de baños. No obstante, es aconsejable llevar una esterilla. Las condiciones e instalaciones no son las apropiadas, es preferible evitar alojarse en estos lugares, además habitualmente no son gratuitos. Como emergencia es válido, antes que dormir a cielo abierto.

-Pousadas de Juventude: durante la reserva previa es conveniente informar de que se es peregrino. No es necesario el carnet de alberguista, es suficiente con la credencial.

-Hostel o Pensão: es conveniente mostrar la credencial, normalmente ofrecen descuentos a peregrinos.